Una de las virtudes del sector vitivinícola es su capacidad de autoregeneración y adaptación para superar las sucesivas crisis que la historia nos ha ido trayendo, cada una diferente, y esta sin duda, la que plantea más incertidumbres.
Podemos superar una crisis de diversas formas, que a menudo conviene combinar. La reacción más inmediata con eficacia a corto plazo suele ir enfocada a restar: disminuir costes, contener gastos, optimizar procesos y RRHH para producir más con menos, etc., acciones con un impacto inmediato en la contención de la crisis pero que a menudo estresan las organizaciones y no garantizan su sostenibilidad a medio plazo.
Por esto, es inteligente combinar esas acciones de resta con otras encaminadas a sumar, es decir, a CREAR VALOR para garantizar la sostenibilidad a medio y largo plazo. Leer más